Aunque con menor énfasis dado a la doctrina de la venida de Jesuscristo, en el Antiguo Testamento, es en esta parte de las Escrituras que esa doctrina tiene su inicio. Por favor, lea en su biblia Is 25:9; Dn 7:13; Zac 14:5 b y Mal 3;2-3. Ya en el Nuevo Testamento, la doctrina de la venida de Jesuscristo no se limita a unos pocos textos. De hecho, es ampliamente enseñada. Se menciona de manera explícita en esta parte de las Escrituras, en alrededor de 300 veces. El apóstol Pablo habla de ella cerca de 50 veces. Es, sin duda, i la doctrina enseñada por los últimos 26 libros de la Biblia!
Durante su ministerio público, Jesús se refirió a ella muchas veces. En su gran sermón sobre el final de los tiempos, él se ocupó de este tema con frecuencia y claridad (Mat 24.17, 30, 37, 39, 42,44). Los Evangelios de Marcos, Lucas y Juan también registran las enseñanzas de Jesús sobre su segunda venida (Mr 13.26; Lc 221.27; Jn 14.3). Pero no fue únicamente el Señor Jesús, que habló de su segunda venida. En el momento de su ascensión al cielo, dos ángeles declararon: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo (Hch 1:11).
Pablo, Santiago, Pedro, Juan y Judas también hicieron inspiradas y profundas declaraciones sobre la segunda venida de Cristo. Aquí están algunas para que usted pueda ver en su propia Bíblia: 1 Ts 4;15,16, 2 Ts 1:7, 10; Tit 2:13; Stg 5:7-8; 1 P 1;16, 3;4, 12; 1 Jn 2:28; Jud 14. Y las palabras claves utilizadas en el Nuevo Testamento en relación a la venida de Cristo es parousia (Mt 24:3; 1 ts 2;19), que significa presencia; apocalipsis (1 Co 1:7; 2 Ts 1:7), que significa revelación y epifaneia (Ts 2:13, 2 Ti 4:8), que se utilizaba en los tiempos del Nuevo testamento para describir el aparecimiento de una deidad.
Pero, ¿cómo será la segunda venida de Cristo? Creemos que será una venida literal (Hch 1:10-11), personal (Jn 14:3; 1 Ts 4:1ª), visible (Mt 24;30ª, Ap 1:7), gloriosa (Mt 16:27, 24:30b; Col 3:4), súbita (Mt 24:44). ¿Cuándo va a ocurrir? La fecha de la venida de Cristo ya está determinada, pero Dios no la reveló en su palabra. Jesús, en una ocasión, dijo que no conocía la fecha de su regreso. Dejó en claro durante su vida, que sólo el Padre conoce la hora exacta de su venida. También dijo que no nos toca a nosotros saber esta fecha, que el Padre puso en su sola potestad (Hch 1:7) teniendo en cuenta que el regreso del Señor algo cierto, debemos tener una actitud de espera, vigilancia y trabajo. Puesto que no sabemos cuándo será su venida, es esencial estar siempre atentos a esa posibilidad (Mt 24:42, 44). No sabemos cuánto tiempo nos queda para esperar el regreso de Cristo. Este tiempo de espera puede ser corto, pero también puede ser largo. Ya sea corto o largo, sigamos el ejemplo de las vírgenes prudentes (Mt 25:1-13). La espera vigilante, sin embargo, no significa inactividad. Es necesario trabajar, tanto en lo espiritual (Mt 25:14-30), así como materialmente (2 Ts 3:6-13).
